España. ¿Estás aburrido de ver y comentar los mismos programas,
series y ‘realities’ de los que habla todo el mundo? No tes preocupe;
hay vida más allá de la programación convencional de Telecinco, Antena
3, La 1, Cuatro, La Sexta o La 2. Los llamados canales generalistas se
siguen llevando la parte del león en lo que audiencias se refiere. Sin
embargo, las cadenas minoritarias que han nacido con la llegada de la
Televisión Digital Terrestre (TDT) nos brindan cada día la oportunidad
de descubrir espacios que por su nivel de ‘frikismo’ no se nos hubieran
ocurrido ni en nuestras peores pesadillas. Aunque, para ser sinceros,
eso es lo que les hace más atractivos para la audiencia. A continuación,
presentamos una selección de algunos formatos de telerrealidad que
están dejando boquiabiertos a muchos espectadores. Son programas que han
llegado a nuestras vidas... y amenazan con quedarse. Eso sí, es mejor
tomarlos en pequeñas dosis: el ‘enganche’ puede ser total.
Lo que necesitas es amor...
La fórmula del amor y el romanticismo y todo lo que eso implica ha sido explotada hasta la saciedad en la pequeña pantalla. Eso sí, ahora a los nuevos espacios se les da una vuelta de tuerca en un intento por sorprender a los televidentes. En Divinity, uno de los canales ‘femeninos’ de Mediaset, se puede ver ‘Millonario busca esposa’ – el título ya lo dice todo– o ‘El vestido de tu boda’, donde el objetivo es que mujeres a punto de contraer matrimonio encuentren el vestido perfecto para la ocasión. Lo más divertido es ver cómo algunas novias y su corte de acompañantes (madres, hermanos, amigos o hijastras) consiguen poner de los nervios a los miembros de las dos firmas nupciales más destacadas de América, Kleinfeld Bridal y Bridals By Lori, y sus respectivos asesores, que son en sí mismos unos personajes.
Una vez comprado el vestido, la misión es entrar en él. Ya se sabe... organizar una boda es muy estresante y muchas novias se ponen de los nervios y acaban comiendo como si no hubiera un mañana. Van a hacerse la última prueba y resulta que la cremallera no cierra. Aquí es donde entra en acción el equipo de ‘Novias a dieta’, un entrenador personal y una nutricionista que ponen las pilas a estas jóvenes en apuros y les hacen sudar la gota gorda.
Si la novia tiene éxito, quizá tenga la mala suerte de acabar en alguna de las peluquerías y salones de belleza que aparecen en ‘¡Tabatha, te necesito!’. Se trata de un espacio con una mecánica muy similar a ‘Pesadilla en la cocina’. El objetivo es transformar un negocio en apuros en una empresa próspera y rentable. La ‘Chicote’ de la laca y los rulos es la implacable Tabatha Coffey. O, a lo mejor, la novia es más afortunada y puede acabar en manos de alguno de los experimentados estilistas de salones exclusivos urbanos que en ‘Cortar por lo sano’ intercambian su papel con peluqueros de ciudades pequeñas y pueblos durante tres días.
Tú, yo... y mis padres
Las típicas aventuras y desventuras de las novias se quedan cortas ante otros programas. Un toque más perverso en los ‘docu-realities’ de relaciones llega con la intromisión de los padres en la vida amorosa de sus churumbeles. En eso la MTV es una experta gracias, entre otros, a ‘Cita con mamá’. En este último, un chico busca el amor citándose con tres madres, las de sus pretendientas. En estos encuentros, el joven tiene que intentar descubrir cómo es la hija e imaginarse su apariencia a través de su madre. El canal musical también emite ‘Padres al control’. En cada episodio se brinda a los progenitores la oportunidad de deshacerse de la ‘indeseable’ pareja de su vástago. Para ello, organizan un casting y eligen un par de citas acordes con sus gustos (los suyos, no los de sus hijos). Los padres siguen el transcurso de cada cita por televisión, acompañados, para colmo, de la pareja no deseada. Luego, el hijo o la hija tendrá que decidir si se queda con su actual pareja o si inicia una nueva relación que, esta vez, sí cuente con la bendición paterna.
Manías y obsesiones
La TDT es una fuente inagotable, un pozo sin fondo, una mina de programas ante los que no te quedarás indiferente. Lo podemos comprobar echando un vistazo a la parrilla del canal Xplora. Si ve ‘Mi extraña adicción’ comprobará que sus parientes, amigos y vecinos son las personas más 'normales' del mundo comparadas con la galería de personajes que pululan por estos documentales. Aquí se presentan las historias de personas que luchan contra una serie de comportamientos obsesivos que están a punto de controlar sus vidas. Un grupo de expertos tratará de echarles una mano para evitar que sigan comiendo el relleno de los cojines o el abono de las plantas; que duerman con su secador de pelo o que olviden su manía de oler limpiador y recoger animales muertos... ¡Miedo me da el día que se atrevan a hacer la versión española!
Ayuda, y mucha, es la que también necesitan quienes aparecen en ‘Enterrado en mi basura’ (Discovery Max). El síndrome de Diógenes salta a la pequeña pantalla con los casos de diversas personas que acaparan de forma compulsiva todo tipo de objetos y desperdicios.
Timos, dinero y empeños
Casi todos estos programas de telerrealidad tienen un punto en común: son productos ‘made in USA’. Ese origen explica que se puedan ver espacios como ‘Cazasubastas’ (Discovery Max). Este ‘docu-reality’ sigue los pasos de Clinton Jones, un especialista en armas históricas y monedas antiguas, y el anticuario Allen Haff. Ambos recorren el país para pujar por lo que atesoran algunos de los más de diez mil almacenes y guardamuebles abandonados en Estados Unidos. Cada día el contenido de muchos de ellos sale a subasta pública y ellos pugnan con otros profesionales del negocio por quedarse con lo que ocultan esos trasteros. Para el pasmo de la audiencia, algunos de esos trastos viejos acaban siendo auténticos tesoros. Ellos, sin embargo, no se quedan con esos objetos, sino que buscan al mejor postor para vendérselo.
Así, no resultaría extraño que cambiaran de canal y aparecieran en ‘Empeños a lo bestia’ (Xplora). Esta vez las cámaras están instaladas en American Jewelry and Loan, una de las casas de empeño más importantes de Detroit. Este espacio sigue las peripecias de los vendedores y los propietarios del negocio y de cómo tratan con su clientela. En apenas diez minutos, puedes ver cómo un tipo intenta vender su colección de películas porno de la década de los setenta –que él mismo interpreta–, cómo una chica lleva a empeñar una ‘playstation’ con la que exige 150 dólares para poder pagar la fianza de su novio encarcelado o cómo un sujeto intenta venderles «una radio de dos vías que contacta con los extraterrestres», aunque todo el mundo vea que es un reproductor de deuvedés. ¡Ahí queda eso! ¿Alguien da más?
Pues sí, para engaños y estafas están los chicos de ‘Los timadores’ (Energy) que tratan de dejar al descubierto los trucos, habilidades y, en definitiva, el ‘modus operandi’ que emplean ladrones y estafadores. Engaños con tarjetas de crédito y cajeros automáticos, saqueos a máquinas tragaperras, trucos con cartas y delitos informáticos quedan al descubierto gracias a la colaboración de los ‘primos’ involuntarios que pican y cuyas caras de sorpresa son de campeonato cuando se descubre el pastel y las cámaras ocultas.
Fuente: El Correo
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